No fue una noche más en la historia de Atlético. El "Decano" se presentó en su estadio para recibir a Quilmes con Pablo Lavallén dirigiendo desde el palco (por cuestiones administrativas no estuvo en el banco suplentes). Luciano Precone volvió a decir presente al costado de la línea de cal y el triunfo fue claro, 3 a 0.
Lavallén hizo pie en Tucumán durante la semana y apenas si dirigió un par de prácticas. Sin embargo, eso no le impidió al ex entrenador de San Martín de San Juan salir hoy a respaldar a su nuevo equipo. Atlético lo respaldó con fútbol y goles.
La chance era ideal para retomar la senda triunfal aunte un débil Quilmes que fue una sombra en 25 de Mayo y Chile y nada pudo hacer para inquietar al dueño de casa. Mucho menos cuando Fernando Zampedri abrió la cuenta, a minutos del descanso.
Otra vez el goleador dijo presente y encaminó el triunfo más esperado. Claro, el "Decano" no gana en su casa desde la primera fecha y necesitaba darle una alegría a su gente (de hecho se despidió hasta 2017 a lo grande).
David Barbona fue el autor del segundo con un tiro bajo que se le coló al arquero "Cervecero" y Luis Miguel Rodríguez, que también se sacó la mufa, estableció el 3-0 definitvo para delirio de todos los "Decanos".
El triunfo fue el mejor regalo para un Lavallén que vio todo desde los palcos y tiene una semana por delante para ajustar detalles e intentar mantener la senda triunfal hasta el final.